Es una constante en cualquier parte del mundo: a medida que se acerca la Navidad, los consumidores comienzan a entrar en pánico y corren a la tienda más cercana a comprar regalos de último momento.
Con la tendencia creciente del e-commerce (demostrada por la facturación de $1.250 millones en el último Hot Sale y los $2.200 millones en ventas online que generó el Cyber Monday, según la CACE), los retailers suelen publicar grandes ofertas en los días previos a las fiestas, generando que los usuarios colapsen los sitios para acceder a los mejores precios y productos.
Este escenario ha demostrado ser un éxito para los retailers siempre y cuando tengan contemplados los procesos y situaciones de contingencia correctos. Una de cada cuatro compras online sucede en los meses de Noviembre y Diciembre, lo que explica que la disponibilidad es crítica para los retailers especialmente durante esa época. Ser capaz de realizar un backup y restaurar información con facilidad y velocidad en caso de un corte de energía o servicio de Internet será esencial para asegurar la satisfacción del cliente durante uno de los periodos más demandantes del año.
La previa a la Navidad es el mejor ejemplo para ilustrar la importancia del data-center y su disponibilidad para los retailers. Cualquier caída o falla puede generar un efectivo negativo en los ingresos y en la experiencia de los usuarios ya que para la mayoría tanto su plataforma de e-commerce como los sistemas de su punto de venta están vinculados a su data-center.
Para minimizar los riesgos y aprovechar los beneficios de la locura consumista de Navidad, los retailers deberían encontrar la forma de emplear la información que ya poseen para anticipar ciertos factores, como por ejemplo cuántas transacciones pueden realizarse en un solo día, a fin de asegurarse que su estructura y tecnología estén a la altura de la demanda cuando llegue el momento.
La época de Navidad es una oportunidad de ventas que ningún negocio puede darse el lujo de dejar pasar y necesitan prever los desafíos tecnológicos con que se enfrentarán para poder responder en consecuencia a la alta demanda de los usuarios. De hecho, las compañías que no comprendan que deben estar continuamente disponibles, tarde o temprano morirán.
Fuente: El Cronista